miércoles, agosto 09, 2006

Siente...



Despierto sobresaltada, confusa.. todo está tan oscuro, tan negro, que no sé si tengo los ojos cerrados o abiertos. Tanteo con mis manos el duro y frío suelo de piedra, asustada por lo que pueda estar a mi alrededor, creando mi fértil imaginación extrañas criaturas que acechan en la noche.




Me agacho rodeando mis piernas con los brazos, intentando conseguir sentir temblar menos. No tengo claro si es por miedo, por frío .. quizá ambas, no sé. Tengo mi cuerpo, mis sentidos, mi mente entumecidos, totalmente indefensa a los peligros que imagino me rodean.
Hay una salida en esta oscuridad sin fin, en este paraje desierto, pero el camino es peligroso y yo no veo. “Cierra los ojos” me dice,” y deja que yo te guíe” y calla, pues conoce mi reacción - “tengo miedo “ pienso. “Cierra los ojos, y aunque el camino se ilumine no los abras. Deja que yo te guíe”, pero yo dudo de nuevo. “VEN”, ahora la voz era firme, con fuerza, dura … pero seguía siendo cariñosa, amable, cálida. Mi cuerpo y mi alma reaccionan, y cerrando los ojos me pongo en pie, y siento … sólo siento, y adelantando un pie tras otro, avanzo en la negrura, sin miedo ahora, pues sé en lo mas profundo de mi alma, que aferrándome a ella, no caeré.


De pronto mis sentidos se agudizan, exaltando mis sensaciones, alerta, no oigo ni un ruido, no veo absolutamente nada en esta espesa negrura, pero noto una presencia cerca de mí. Cierro los ojos fuertemente tratando de escuchar algo, pero sólo escucho el latido de mi acelerado corazón y mi respiración cuando de pronto una voz susurra .. “Siente…”. Esa voz que suena en mi cabeza, pues soy extrañamente consciente de que mis oídos no captaron esa palabra, y temiendo estar volviéndome completamente loca, me encojo más en mí misma, tapándome los oídos con las manos, como si con eso pudiera impedir esa intrusión.
“Siente…” de nuevo escucho esa voz dentro de mí .. es una voz suave, cálida, amigable.. y siento, o creo sentir, como el frío disminuye en mi cuerpo, o quizá sea solo mi imaginación. Me siento agradecida a esa voz, pues sé que es gracias a ella, y me quedo callada, aguardando en silencio que vuelva a hablar. Pasa el tiempo, no se cuánto, y vuelvo a sentir el frío, la soledad, el peligro, quiero que vuelva la voz.. la llamo tímidamente en voz alta, como si pudiera oírme y me fuera a hacer caso … “Solo siente …. “ insiste en mi mente, sonrío levemente, quizá de desesperación, quizá de agradecimiento, quizá …. Cierro los ojos, me relajo un poco… y siento…
Siento como el su calor me invade y deja de temblar mi cuerpo, siento como mágicamente se alejan las criaturas que crea mi imaginación, siento como mi alma retiene el aliento como intentando impedir que la abandone de nuevo.. mas desaparece, despacio, lento .. provocando que sienta aun más miedo, aun mas frío y mi cuerpo más indefenso. Aparece y desaparece, espaciándose más y más en el tiempo, hasta que lanzando un grito que me sale del alma lloro con cada fibra de mi cuerpo y vuelve junto a mi, en silencio, permitiendo que note su presencia.. y lloro, como no lo he hecho nunca, y me arropa con su calor y paciencia, así me quedo dormida, hablando con ella en sueños.



2 comentarios:

kiasca dijo...

precioso, sin comentarios, me has dejado alucinada, me ha encantado!!!!!!

Anónimo dijo...

Para variar, coincido con Kiasca. Muuuy bueno. Como ya dije en una ocasión: "No temamos al miedo. Temamos a la insensibilidad, porque tener miedo es estar vivo, ser insensibles, estar muertos."